Hazte entender, mejor.

El autobús de la discordia.

Como el grado de indignación que tengo ahora mismo dentro del cuerpo es bastante alto, he decidido que es el momento de escribir sobre esto y reventar.

Os voy a abrir mucho de mí en esta entrada pero necesitaba hacerlo…

Empezaré por el principio (muy lista eres, sí!): el lunes me pasaron la foto del autobús de HazteOír que estaba circulando por las calles de Madrid… al principio (no os lo voy a negar), no entendí bien el mensaje, porque sencillamente me parece una nimiedad, y paso a explicarme: «Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva». Hasta aquí todo ok (no me malinterpretéis por favor). Pero lo que le seguía era aún peor: «Que no te engañen». ¿Qué no te engañe quien exactamente?, y ¿a quién no hay que engañar?

En su parte final (más pequeña, por supuesto para que el mensaje no sea tan llamativo), rezaba (y nunca mejor dicho): «Si naces hombre, eres hombre. Si naces mujer, seguirás siéndolo». Y para mí este mensaje tiene varias lecturas:

  1. El hombre primero, por supuesto, no vayamos a darle a la mujer un poquito de importancia
  2. Si naces mujer, jódete que te putearan toda la vida por el simple hecho de serlo. Y si se te ocurre defender tus derechos corres el riesgo de ser llamada «feminazi» (este es el momento en el que muchas personas me lo llamarían a mí… pues adelante! no os voy a decir por donde me lo paso)
  3. Precioso el dibujito de la niña con falda y el niño sin ella; la niña con coletas y el niño con el pelo corto: un aplauso por esta educación tan maravillosa llena de estereotipos, un aplauso!

Según he podido informarme, el autobús es una publicidad para promocionar un libro GRATUITO (recalco gratuito porque saben que ni quisqui lo compraría y lo quieren difundir igualmente) en el que hablan de como las leyes educativas de 10 comunidades autónomas adoctrinan sexualmente a nuestrxs pequeñxs (supuestamente). Y yo, como maestra comprometida e indignada de la vida con este tema, he decidido pedir este ejemplar gratuito para informarme con conciencia de lo que con él pretender «reivindicar» y poder hablar en consecuencia. Ya os contaré como ha ido la experiencia (aunque no la auguro muy buena, la verdad).

No había querido darle mucha más importancia al tema para no ofrecerles demasiada publicidad gratuita pero es que oye, han salido hablando en el programa «Espejo público» y me he crispado la vida entera!!.

Ha sido invitada la portavoz de la organización para hablar de ello y de verdad os juro que… (voy a respirar hondo para que no salgan sapo y culebras por mi boca). Esta mujer  dice que esa frase («Los niños tienen pene. Las niñas tienen vagina») esta recogida en un libro de la E.S.O… a ver que me entere bien, me parece muy ok que esto este en un libro de texto, pero para eso estamos las personas que nos dedicamos a la educación y poder dar a conocer todas las realidades que existen, porque es algo a lo que se van a tener que enfrentar en la calle.

La escuela actúa como compensadora de necesidades, es la institución que pretende desarrollar las capacidades de lxs niñxs y prepararles para la vida real, y que existen niñas que tienen pene y niños que tienen vulva es una realidad y no creo que haya que esconderlo desde la escuela.

El problema real de esta gente es que consideran que se están burlando los derechos de educar libremente a lxs niñxs que tienen los padres y las madres sobre ellxs, porque según se recoge en ese maravilloso libro que han publica, hay diez comunidades autónomas que recogen dentro de sus leyes educativas, apartados de adoctrinamiento sexual; cuando en realidad lo que se esta haciendo es dando visibilidad y voz a colectivos que se han visto visibilizados durante siglos porque no son considerados «normales». Colectivos que según la OMS son tachados de personas con una alteración (esa misma organización que hace no mucho tiempo tildaba la homosexualidad como una enfermedad que era capaz de curarse).

Yo, que intento sacarle la rosca a todo, puedo llegar a entender que la transexualidad es una alteración, y dejarme que me explique por favor: aunque creo que esa no es la palabra correcta, es una «alteración» en el sentido de que el sexo biológico con el que nace una persona no se corresponde con el sexo mental y por lo tanto es algo a lo que hay que buscarle una solución. Son personas que no se sienten identificadas con el rol o sexo biológico que se les ha asignado al nacer y que están en todo su derecho de cambiar.

Y para colmo, están recaudando dinero para luchar contra la campaña que se les esta haciendo «en contra»… Hablan de que se esta vulnerando su libertad de expresión… dejad que me ría a gusto! JA JA JA

Lo único que me consuela de este tema es la respuesta que ha habido en la sociedad a favor de la retirada del autobús y de como atenta a los colectivos que defienden la diversidad de género.

 

Enfermos vosotros!

Con la Iglesia hemos topado!

Tenía pensado escribir sobre otra cosa, pero me lo voy a tener que reservar para un poco más adelante porque tengo varias cosas en la recamara que he visto o me han contado estos últimos días que me han sacado gravemente de mis casillas.

Quienes leéis con un poco de constancia mi blog, habreís deducido varias cosas: estoy absolutamente a favor de todos los tipos de colectivos LGTBIQ y me repugna la Iglesia. Y me refiero a la Iglesia como institución (más como mafia, que es lo que me parece) y la religión católica como creencia.

Hace mucho tiempo que me considero atea, me parece que todas las religiones o creencias por la época en la que fueron «creadas» tienen un alto componente machista que hoy en día se debería erradicar, así como la poca flexibilidad en cuanto a orientaciones sexuales. Y aquí es donde entro en el tema de hoy.

Esta tarde he leído este artículo:

http://www.dosmanzanas.com/2017/02/un-alumno-gay-de-1o-de-bachillerato-planta-cara-al-profesor-de-religion-que-aseguro-en-clase-que-la-homosexualidad-es-una-enfermedad.html

Os pido desde aquí, gente solidaria y desinteresada, que alguien por favor me explique con un ápice de cordura y una argumentación válida como en pleno siglo XXI puede seguir existiendo gente así. Pero en el fondo, ¿sabéis qué? Este tipo de cosas han dejado de sorprenderme porque, como dice el refrán: ‘con la Iglesia hemos topado’.

Me parece que es una institución que está podrida, que se ha quedado anclada siglos atrás, cuando la mujer se dedicaba a procrear y cuidar de su casa. Desde que me declaro abiertamente no creyente (ojo, que yo he hecho la comunión y todo) he tenido que oír un sinfín de barbaridades.

Y es que perdonadme pero… PARA ENFERMOS VOSOTROS! Una religión que limita nuestra forma de amar, que nos ata con vínculos como el matrimonio, que nos hace creer que todo lo que sucede a nuestro alrededor tiene la influencia de Dios, que (a pesar de múltiples demostraciones científicas) nos quiere hacer creer que nacimos de la nada, que relega a las mujeres a «nacer de la costilla del hombre», que permite que sacerdotes, obispos, curas, etc.; abusen de niñxs y adolescentes… Y aquí podría hacer una larga lista de todas esas cosas que me indignan de una religión que, para mí, no es válida. Aquí os hablo de la religión católica, pero lo extiendo a todas aquellas que vulneren cualquier tipo de derecho del ser humano.

Y os diré una cosa, esto pasa en un centro  de educación pública de un país con un sistema educativo supuestamente laico, lo cual me indigna aún más.

El otro día, en clase para la preparación de las oposiciones me dijeron algo que creo nos deberíamos tatuar todas las personas que nos vamos a dedicar a la enseñanza, de cualquier tipo, cuando acabamos la carrera: para enseñar, hay que dejar nuestros prejuicios en casa. Así que vamos a dejar de fijarnos en lo «malo» del resto y a enseñar habilidades y destrezas que nos ayuden a ser mejores personas.

 

2×1

Pasen y vean, estamos en oferta!!

Muchos días de silencio, lo sé. Pero es por una buena causa ^^

Hoy os traigo algo que me condena enooooormemente la vida, no puedo remediarlo! Y para introducir el tema os haré la siguiente pregunta: si tenéis mellizxs/gemelxs, ¿les vestiríais iguales?

Mi respuesta es rotunda: NO!

Es un pensamiento que he tenido de siempre y que cada vez más, como educadora y persona comprometida con el mejor desarrollo posible de esas criaturillas tan preciosas, me niego a hacerlo y es que no le encuentro la lógica por ningún lado.

Y aunque os hablo de gemelxs o mellizxs, también es aplicable a hermanxs que tienen distinta edad, porque también lo he visto y me crispa la vida igualmente.

Os daré varias razones por las que no veo factible el asunto:

  • No me digáis que se ahorra porque es mentira. Al final terminas comprando la misma ropa que si solo tuvieras unx niñx pero multiplicado por dos
  • Si compras modelitos como si tuvieras unx, puedes irles cambiando la ropa y parece que tienen más 😉
  • Como educadora pienso que ponerles los mismos conjuntos el mismo día (y me refiero también a ir iguales de pies a cabeza, que tengo unos gemelos en el trabajo y yo creo que deben llevar igual hasta los calzoncillos… que si ya es difícil diferenciarlos imaginaros cuando visten exaaaactamente iguales), no les ayuda en nada a identificarse como personas únicas con una identidad propia. No creo que así se les favorezca a crear su propia personalidad, a desarrollar sus gustos, etc.
    Y aunque os digo ropa, también podemos incluir mochilas, meriendas…

 En este sentido tengo que hablaros también de la dependencia que crean lxs progenitores entre este tipo de hermanxs. Como maestra soy partidaria de separarles cuando son escolarizadxs, ya que bastante tiempo pasan fuera del colegio juntxs como para que encima en ese espacio también tengan que estar en la misma clase. Tienen que tener sus propios amigxs, crear lazos independientes, aprender cosas distintas y después compartirlo todo y aprender el doble! Además hay que tener cuidado con exigir las mismas cosas al mismo tiempo, me explico: aunque se hayan concebido a la misma vez y hayan nacido en el mismo momento, no implica que sus ritmos sean iguales… de hecho no! Como personas independientes, tienen ritmos de desarrollo distintos y por lo tanto no se les puede exigir al mismo nivel porque (menos mal!!) eso no va a ser así!.

Y aquí entro en otro tema: el de las comparaciones (que bien se sabe, son odiosas!!), en el que extiendo a lxs hermanxs en general: como padres/madres no les hacéis ningún bien a vuestrxs hijxs comparándoles, y por ende poniéndoles etiquetas. Como ya he dicho cada persona tiene sus ritmos, sus momentos, sus gustos, sus necesidades… por tanto, no podemos comparar a A de 7 años que hablaba perfectamente a los 3, con B de 4 que aún tiene dificultades para organizar las frases.

Pero bueno, creo que no voy a meterme en mucha más polémica porque al final me lío y lo mismo me lincháis XD. Pero una cosa os voy a decir, cada unx es libre de vestir a sus hijxs como quiera que yo voy a seguir intentado educarles de la mejor manera ^^.

Feminismo ’17

Sobreviviendo a esta sociedad hetero-patriarcal

Esto es lo que tiene que la inspiración venga sola, que hay veces que me tiro semanas sin escribir y otras que escribo un día sí, otro también XD

Desde hace unos días estoy retomando conversación con una chica que conocí hace más de dos años con la que intercambio artículos, pensamientos, vivencias, etc., relacionadas con el feminismo. Y esto me esta trayendo más de una buena reflexión.

El otro día, viendo la Gala de los Goya (tengo que decir que cada vez veo menos tele, pero no echaban nada mejor un sábado por la noche… triste, lo sé) hubo varias reivindicaciones feministas, pero es verdad que se trata de un sector muy machista.

Ana Belén, cuando subió a recoger el Goya de Honor, dio uno de los discursos a favor del feminismo de la noche (olvidemos las reivindicaciones a favor de las mujeres de Dani Rovira, que están cogidas un poco con pinzas), diciendo que las mujeres tenían que tener más protagonismo en su industria y que posiblemente si no hiciera falta interpretar a ciertas mujeres, no estarían ni las que están (hecho real y totalmente penoso). Pero después salió Leticia Dolera, directora y feminista, que se encontró con unos pocos dilemas frente a la Gala. Aquí os dejo su reflexión, muy buena:

http://www.pikaramagazine.com/2017/02/contradicciones-de-una-feminista-en-la-alfombra-roja/

Me pasa que últimamente ya no puedo ni ver una película tranquila, ni leer libros, ni engancharme a una serie sin sacarle las taras, porque amigas, es lo que tiene ponerse las gafas moradas que una vez te las pones con ganas no puedes vivir «tranquila». Porque sí, porque en esta sociedad en la que vivimos, por mucho que nos parezca que hemos avanzado, seguimos tratando a las mujeres: como objetos, las seguimos sometiendo, les marcamos unos cánones de belleza, les proyectamos el futuro, condicionamos su vida sexual, las utilizamos, las humillamos…

El martes pasado fue la última vez que vi el programa «El Hormiguero» y os explicaré por qué: es día iba como invitada la maravillosa Mónica Carrillo y nada más empezar Pablo Motos empezó a soltar perlas como esta:

– ¿Sabes que eres un mito erótico?
– Hay gente que solo ve las noticias porque sales tú

Cuando la entrevista continuaba, ella se puso a contar una anécdota en la que un hombre se le había acercado en la playa mientras jugaba con su sobrino en el agua para pedirle que le firmara su libro que lo estaban leyendo su mujer y él allí, a lo que no se demoró mucho la pregunta estrella de la noche:

– ¿Llevas bañador o bikini? ¿De qué color? ¿Blanco? ¿Negro? ¿Amarillo?

Mónica solo trataba de seguir contando la historia mientras que Pablo insistía e insistía. Pero no contento con esto, se pusieron a leer microcuentos del nuevo libro de Mónica, los cuales habían sido elegidos todos por Pablo… os podéis imaginar de que trataban todos viendo la dinámica que estaba siguiendo el programa.

Me pareció denigrante, de verdad, me sentí avergonzada, sucia, me produjo una sensación entre asco y pena, por lo que decidí que ese sería el último día que vería el programa, ya que se junta el espectáculo que montó con las sucesivas sobradas que se marcan todos los días Juan y Damián, etc, etc, etc.

Dicho todo esto… es muy difícil y a veces hasta duele (porque sí, duele! duele romper todo eso que te han ido marcando, duele sacártelo de dentro, duele darte cuenta de según qué cosas) ser feminista en los tiempos que corren y solo puedo dar gracias a aquellas que nos han ido abriendo el camino y que han conseguido que hoy en día esto sea un poquito más fácil.

«Quiero ser lo que seré, ese es mi plan… libre aunque eso joda»

Lo mismo no escribo en muchísimos días que cojo carrerilla XD

Así que aquí me encuentro en mi reflexión de lunes, contando lo que me ha pasado hoy… Llevo unas semanas planteándome muchas cosas, necesito soltar todo lo que llevo dentro, expresarlo y reafirmarme en ello y este es uno de los canales que he encontrado para hacerlo. Además, cada vez me suelto más con las cosas que comparto en Fb y las fotos que cuelgo en Instagram (con sus respectivos mensajes).

Ayer, sin ir más lejos, subí una foto de un tatuaje que me hice la semana pasada:

Y esta mañana me he encontrado con que una chica, a la cual hace años que no veo y unos cuantos más que no cruzo más de cuatro palabras con ella, me ha escrito y  me ha llamado valiente; me ha dicho que me he convertido en una mujer digna de admirar y maravillosa, que soy única y una de esas mujeres de las que se siente orgullosa. Y yo me he quedado sin palabras y me ha dado por pensar: ¿realmente estoy provocando eso? ¿de verdad se tiene esa imagen de mí? porque para nada me siento valiente ni una mujer digna de admirar…

Para rematar, cuando he ido al gimnasio me he encontrado con otra conocida que me ha dicho que el otro día leyó el blog y que le pareció genial lo que había escrito… De verdad, ha sido demasiado para el día de hoy, os lo prometo XD.

Me ha dado mucho que pensar el día, en serio os lo digo, llevo todo el día con el runrún. Yo escribo las cosas, comparto publicaciones, subo fotos y las acompaño de textos que siento dentro; lo hago para liberar un poquito de mí, para sacar parte de todo lo que se va construyendo en mi interior… No lo hago por nada ni por nadie, pero si realmente sirve para algo más que para construirme a mí misma, me doy por satisfecha =)

Pedroche «feminista»

Esta chica cada vez que abre la boca (o bien sale en televisión enseñando chicha), sube el pan!

Como todxs sabréis (con mayor o menor profundidad), esta muchacha lleva presentando las campanadas de Antena 3 durante tres años seguidos, generando una correspondiente polémica con el vestido que saca, que colapsa noticias y blogs de actualidad durante los primeros días del año. No he querido entrar en esta polémica antes porque realmente me parecía absurda, pero el asunto de la Pedroche esta empezándome a tocar la fibra.

Conozco a Cristina desde sus tiempos mozos en el programa «Tonterías las justas» (ahora me pongo a ver todos estos tipos de programas y no puedo verlos más de 10 minutos porque me crispo la vida y no paro de sacarles pegas, por eso he optado por dejar de ver la tele XD), donde hacía el papel de «tontita» (el cual sigue haciendo), del que no tiene ni un pelo.

He de decir que es una chica que me cae bien, me parece simpática, más inteligente de lo que aparenta en la tele y con bastante cabeza. Pero también tengo que decir que desde que empezó su relación con Dabiz Muñoz me aborrece un poquito el tema… Una chica que paso de estar soltera y muy bien, a desvivirse por él… me chirría todo mucho. Qué sí, que esta muy bien el amor, que me parece de puta madre que haya encontrado a alguien con quien compartir su vida pero me parece todo demasiado… no sé como explicarlo realmente, pero me da un poco de grimita, lo siento.

Te tatúas el perfil de él, se sigues ‘around the world’, te metes en su profesión… mmm no sé, de verdad, me parece todo como demasiado. Qué sí, me diréis que la chica no ha dejado de trabajar en lo suyo (faltaría más!), pero no me podéis negar que está demasiado metida en el mundo él…

Al margen de esto, voy a entrar a hablar en el tema del vestido de nochevieja… El vestido negro que llevo el primer año he de decir que me encanto (muy top y precioso), el del año pasado lo siento pero no me gusto nada (para gustos los colores) y el de este año (si realmente se le puede llamar vestido) sinceramente que fascinó!. Alrededor del vestido se crean varias polémicas cada año pero la que más me preocupa es la que gira en torno al supuesto «feminismo» que defiende poniéndose esos vestidos.

No os voy a discutir que ella sea libre o no de ponerse el vestido que quiera, porque creo realmente que es una mujer con sentido, ciertamente «libre» que decide lo que quiere ponerse en una ocasión como esa, cuestión por la ella dice llamarse feminista (permíteme que lo dude, Pedroche). Pero no podemos olvidar lo que a mí me parece más grave: ella esta allí y la dejan elegir el vestido que quiera (que saben que va a ser uno que va a dar que hablar) porque es una mujer jóven, atractiva, con un buen cuerpo, guapa… al fin y al cabo ella esta allí por su físico y juventud, no por sus logros o cualidades como profesional (como pasa con los hombres que la acompañan año tras año). Tú puedes ser todo lo libre que quieras para elegir el vestido que te quieres poner, pero estas entrando en el juego de las televisiones por seguir vendiendo a las mujeres como un reclamo sexual, y si no lo ves es que no eres tan feminista como dices.

Por otro lado, no voy a entrar a hablar en todas las polémicas que se han levantado cuando habla y suelta algún comentario poco apropiado, pero si quiero hablar de su paso por el programa «El Hormiguero» esta semana.
Empezaron hablando del vestido, de sus programas, blablabla… no vi el programa pero luego vi por la redes sociales lo que le había preguntado a una chica que decía que quería ser la primera en pisar Marte en 2033, para lo cual ya se estaba preparando y decía ser su sueño.
Cristina Pedroche, en uno de sus momentos de máxima lucidez  no tenía otra cosa que preguntarle a la muchacha que qué pasaba si en este tiempo que le quedaba se echaba un novio y no quería despegarse de él… Vamos a ver Pedroche, el feminismo defiende muchas cosas y nos aleja de otras muchas, entre ellas el patriarcado y tú con esa pregunta no haces más que perpetuar ese sistema (que por descontado tu también lo estas manteniendo). Sé que no estaba hecha con maldad ni nada pero esa pregunta sobraba.

Como reciente consolidada feminista, tengo que deciros que Cristina Pedroche me parece una falsa «feminista» que realmente no ha entendido bien el concepto  de lo que es ser feminista.

Recorta, dibuja y colorea

«La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo»

No me considero la mejor educadora, ni de lejos, pero si que últimamente me he vuelto muy consciente de que de un tiempo a esta parte estoy siendo muy consecuente con las cosas que enseño y con las cosas que no también.

Me confieso fan incondicional de trabajar la inteligencia emocional en lxs niñxs, ya que considero que es una herramienta muy útil para ellxs no solo en su presente como niñxs, sino también en su futuro como personas adultas.
Alguien emocionalmente inteligente es capaz de muchas cosas, de dominar muchas situaciones, de actuar de la mejor manera (siempre intento no decir de la forma «correcta» ya que creo que no hay una forma correcta ^^). Además me gusta trabajar especialmente las emociones que considero son positivas para las personas y para que la sociedad se desarrolle de una manera más equilibrada y armoniosa.
Obviamente no hay que olvidar las emociones que pueden ser «negativas», pero trato siempre de enfocarlas hacia de búsqueda de soluciones, a través de mecanismos prácticos y alcanzables para ellxs.

Se que sueno muy happy flower, que vivimos en un mundo podrido (perdonarme si no pensáis igual) y que esto es muy difícil de cambiar pero si no lo intento yo ¿quién lo va a hacer?.

Hay profesiones de las que siempre me he sentido muy desvinculada. Profesiones como ser abogado son de esas que me veo incapaz de ejercer… el simple hecho de pensar en tener que «defender» a un asesino, un ladrón… no podría, es superior a mis fuerzas y va contra mis principios.

Sé que muchxs pensaréis que mi profesión es recortar, dibujar y colorear… claro que lo hacemos!!! Bueno, más que nosotxs (ojo a este dato también, somos más mujeres que hombres en esta profesión, cosa que me fastidia también), ellxs!!!
Desde que empecé a estudiar la carrera pienso que en nuestra etapa de educación secundaria obligatoria todxs deberíamos dar la asignatura de psicología del desarrollo porque te hace conocer mejor de dónde venimos, cómo hemos crecido, cómo crecerán nuestrxs hijxs si los tenemos o los de lxs demás. Cosas tan básicas y con «tan poca importancia» como parecen el dibujo o el juego, son fundamentales en el desarrollo de un/x niñx y lo mejor que pueden hacer a esas edades es dedicar la mayoría de su tiempo a hacerlo!
Ayer cuando estaba llegando al colegio, me fijé en lxs niñxs que estaban en el patio y vi a la profesora… pensé en lo aburrida que estaría (pensamiento de muchos mortales) pero en seguida caí en la cuenta de que cuando yo lo he hecho puedes sacar tantas conclusiones viéndoles jugar… no me voy a poner mucho más técnica porque os aburriría, pero os sorprendería lo que se puede aprender y sacar de ellxs viéndoles jugar o dibujar.

Además de esto, intento enseñarles valores: de amistad, empatía, inclusión, respeto… a veces cuando hablo de lo que intento enseñarles en el poco tiempo que paso con ellxs, cosas como que es mejor adoptar que comprar animales, la gente me dice que para que lo hago si yo no voy a conseguir cambiar eso… Podría decir que me enfada que me digan esto, pero más que enfadarme me da pena ya que son gente que no se interesa lo más mínimo en intentar cambiar el mundo aunque sea un poquito y, perdonarme que os diga pero creo que yo, por mi profesión, soy uno de los agentes de cambio más importantes de esta sociedad.

Porque como dijo el sabio de Mandela: «La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo».

Salir del armario 2.0

Y aquí me encuentro un día más, hablando de algo que me crispa y me encanta a la vez (a vosotrxs también, que lo sé ;))

¿Qué fácil y sencilla es la vida siendo heterosexual no?

Os contaré un secreto… antes de salir con una chica nadie me lo había planteado, ni yo misma me definía como tal… fue enamorarme de una mujer y… ¡Bienvenidos los comentarios sobre mi sexualidad!

Ni antes ni después me ha gustado etiquetarme como nada, ni una cosa ni la otra y cada vez menos. Creo que la gente que me quiere y me conoce no necesita esa distinción, de verdad. ¿Soy feliz? Sí! Entonces da igual de que sexo sea la otra persona.

En relación a esto, el otro día María Herrejón subió un vídeo a Youtube que os invito a ver (podeís ver solo las partes que os señalo debajo del vídeo)

Minuto 2:08, le pregunta qué piensa de las personas homofóbicas… nada más que añadir, Herre.

Minuto 8:50, donde alguien le pregunta que si alguna vez ha dudado de su sexualidad. A ver que nos entendamos, ¿de verdad eso es algo que importe?

Minuto 12:06, pregunta estrella :¿te has planteado alguna vez la bisexualidad?
Voy a ir por partes, a sabiendas de que me colguéis:

  1. Si fuera un hombre esta pregunta no se la harían (tal cual)
  2. En vez de eso, pregúntale si es heterosexual… ah no claro, que eso no se pregunta, eso se presupone en todas las personas.
  3. ¿Qué coño importa si se lo ha planteado o no? Es su vida

Al margen de esto… ¡Me quito el sombrero ante su respuesta! (aquí es donde pondría las manitas aplaudiendo del whatsapp XD). Creo que has descrito perfectamente lo que pienso, y vuelvo a ir por partes: como educadora nunca (jamás) me han gustado las etiquetas, pienso que son algo contraproducente al propio desarrollo del ser humano, ya que nos limita y nos encasilla. Obviamente (como bien dice María), en esta sociedad en la que vivimos son necesarias (por desgracia) porque tenemos las miras tan cortas que no vemos más allá de ellas. Lx niñx que saca malas notas es «tontx», fracasadx», etc… lo que condiciona su desarrollo y desenvolvimiento ante la vida. Lx niñx que es «guapx» y «listx», triunfará en la vida y es lx niñx de los ojos de papá/mamá… Voy a dejarlo aquí porque me voy condenando por segundos, espero haberme explicado en mi planteamiento.

Igual pasa con la sexualidad. Como ya dije en una entrada anterior sobre «Salir del armario», la sociedad es la que nos encierra dentro de ese «armario», es esa privación de ser libres y poder demostrar lo que somos lo que nos obliga a «meternos» dentro. Que a un hombre o una mujer  se le atribuya la etiqueta de ser heterosexual por el simple hecho de nacer hace que el resto de personas que no se sienten identificadas con ella se vean obligadas a «esconderse».

Esto pasa cuando reconoces ser homosexual, pero igual pasa cuando eres bisexual (no me gusta ninguno de los términos, porque como ya he dicho no me gustan las etiquetas pero creo que es necesario) a lo que tienes que añadir comentarios del tipo: ¡qué listx eres, así tienes más donde elegir!; o: ¡pero algunx de lxs dos te tiene que gustar más!.

Vamos a ver… nos pasamos la vida eligiendo cosas, decidiéndonos por una o por otra… ¿me puedes dejar que me guste lo que a mí me de la gana?

Al margen de esto, como ella, pienso que tu sexualidad va surgiendo y no debemos cerrarnos puertas, sino que disfrutemos de lo que somos y de lo que queremos. Da igual si es hombre o mujer o cualquier otra identidad (aquí entraría otro tema que daría mucho que hablar… para otra ocasión!).

A raíz de estas palabras suyas debió montarse algo de revuelo (de lo cual no me entere hasta que mi maravilloso amigo Youtube me recomendó este vídeo).

Otra vez por partes (mira que me gusta lo de enumerar las cosas oye! soy una chica ordenada, como veis ^^):

  1. ¿Por qué tiene que justificarse de nada?
  2. Esta gente que se dedica a ponerla verde, ¿no tenéis nada mejor que hacer?
  3. Si no os gusta lo que dice, simplemente no la veáis. Hay miles de canales en Youtube para entretenerse así que no malgastes tus fuerzas en algo que no te va a hacer bien/gustar (por esta misma razón yo no veo a gente como Jorge Cremades o El Rubius, mejor me lo ahorro)
  4. ¿De verdad alguien ha podido pensar que ella realmente esta invisibilizando ningún colectivo? ¿Acaso no se ha explicado bien? Porque a mí me parece que lo hace que te cagas.

A todxs estxs haters os diré algo: pensar las cosas dos veces antes de hablar, os sorprendería la cantidad de conclusiones que puedes sacar tu solx. Y quedaros solo con lo bueno de lo que veis/oís y lo malo transformarlo, porque siempre se puede sacar algo.

De verdad, olvidemos al resto del mundo y disfrutemos. Vamos a dejar ser a la gente lo que quiera ser porque al fin y al cabo es AMOR, y es una de las cosas más bonitas que hay en este mundo así que no le cortemos las alas, por favor!

 

Tiran más dos tetas que dos carretas

No es lo que parece…

¿En serio? ¿Pero que mierda de dicho es este? ¿En que lugar deja a las mujeres? ¿Y a los hombres?

A ambos los deja por los suelos: a unas las tacha de objetos sexuales y a los otros los tacha de babosos.

Valdría la pena empezar a valorar un poquito más esa forma tan peculiar que tiene la mujer, esas dos protuberancias (llamarlo como más os guste) que sirven para tantas cosas… Porque como mujeres tenemos que estar orgullosas de nuestro pecho, porque sirven para muchas cosas: dar y recibir placer, sentirnos mejor, enseñarlas o no, y no nos olvidemos de una de las cosas que (para mí) es la más bonita que se puede hacer… dar de comer a un pequeño ser humano!!!

Tenga intención o no de tener hijxs en un futuro, el hecho de llevarlos en tu vientre nueve meses y darles el pecho en sus primeros pasos por la vida, me parece el regalo más bonito que la vida le puede dar a una mujer (libre eres de ejercerlo o no). Cada mujer es libre de criar a su retoñx como le parezca y decidir si amamantarlo o no (la leche materna es el alimento más completo que puede tomar el bebé en los primeros seis meses de vida, científicamente demostrado), que ya bastante difícil se hace en estos tiempos que corren decidir si hacerlo o no. Y en el caso de optar por esta opción… ¡Qué difícil es hacerlo en público!

Y este es un tema que me crispa especialmente porque, ¿qué problema tenemos con ver una teta?

Claramente ninguno (demostrado queda en las miles de portadas de cientos de revistas, series de televisión, películas, etc) cuando se muestran como un objeto de deseo y no como una manera preciosa de alimentar a un bebé.

Estas navidades he estado trabajando en un centro comercial y dos mujeres han dado de mamar a sus bebés en mi trabajo… ¿mi reacción? Fascinación y embobamiento al ver semejante escena tan bonita. Llamarme loca o lo que queráis, pero me quedo encandilada cuando veo a una mujer dando de mamar a su bebé, ¡¡¡me encanta!!! Me parece un momento mágico, precioso… observar como algo que sale del cuerpo de la mujer es capaz de cubrir la necesidad más básica de un recién nacido.

Y es que todavía no logro entender que problema tiene alguna gente al ver esta imagen, porque aún hay personas que les parece asqueroso ver esta escena, personas que les dicen que se tapen o personas que las llegan a insultar. Pero vamos a ver, ¿estamos locos? ¿no se supone que somos una sociedad moderna y avanzada? ¿Acaso nos hemos olvidado de que esto se hace desde mucho antes de que ningunx de noxotrxs existiera?  Y lo peor es que hay sitios en los que esta hasta prohibido!!

Aprendamos a ser respetuosos y apreciar las cosas bonitas de este mundo y, aunque yo entiendo que no todo el mundo es apasionadx de lxs niñxs como lo soy yo, sepan valorar que es un acto precioso y de gran valor para el desarrollo de las futuras personitas que van a habitar este mundo.

Hacia El Corte Inglés va una burra…

O cómo afrontar las compras de navidad

Que quien dice El Corte Inglés, dice Carrefour, Poly, Alcampo y ese sin fin de tiendas, supermercados y grandes almacenes que hacen negocio con los juguetes en navidad.

Personalmente, desde hace algunos años, es un tema que me incomoda especialmente por varios motivos:

El consumismo.

Tengo algo muy importante que deciros como educadora y persona con dos dedos de frente: los niños no son más felices cuantos más juguetes tengan, ¡sorpresa!
Los anuncios de televisión y la sociedad en la que vivimos no ayuda en nada en esto, ya que desde bien pequeños enseñamos a nuestrxs retoñxs a poseer cosas, personas (tema para otra entrada)… lo que hace que en esta época tan señalada del año pidan por esas boquitas preciosas que tienen, y se les dé todo lo que piden (o no, ojo, que hay gente con sentido común).
Cada año tienen que hacer antes la carta a los Reyes y/o a Papa Noel porque claro, las ofertas cada vez salen antes y más vale pájaro en mano que ciento volando, por lo que hay que hacerse con los juguetes más pronto. No culpo a las grandes y pequeñas superficies ojo, ellas solo atienden a las demandas y son puras estrategias de marketing para que sus ventas vayan viento en popa durante la campaña de navidad. El problema principal lo tiene la sociedad, que es la que marca los ritmos en los que las cosas se suceden.
Con todo esto que estoy diciendo parece que estoy en contra de todos los juguetes… ¡Para nada! Lo que quiero venir a decir es que los juguetes hay que comprarlos y utilizarlos con cabeza, que como madres/padres deberían buscar aquellos con los que sus retoñxs se desarrollen correctamente, que fomenten todos los aspectos del desarrollo y que en la medida de lo posible favorezcan la interacción con lxs otrxs… y que no nos volvamos locas comprando juguetes que, posiblemente, después de estas fechas no vuelvan a tocar!
A este respecto podría hablar no solo de la navidad, sino también de eventos como San Valentín, el día de la madre/padre, etc… pero me da mucha pereza, ya que hay mucha tela que cortar XD.

Los estereotipos de género.

Esto es algo que me condena la vida mucho, de verdad os lo digo… Os invito a que hagáis algo: ojear un catálogo de juguetes, cualquiera. Si no tenéis ninguno en formato físico, adelante con los catálogos online.
Ahora fijaros detenidamente en las páginas destinas a juguetes de niñas y de niños (primera cosa que me chirría, primera separación por género, primer encasillamiento…). Una vez hecho esto mirar qué tipo de juguetes hay en cada una de ellas y los colores más representativos de los mismos.
A muchas personas les parecerá lógico y normal que entre los juguetes de «niñas» encontremos todo lleno de muñecas, cocinitas, bebés… y entre los juguetes de «niños» kit de herramientas, construcciones, superhéroes… y mi pregunta es: ¿por qué esta clasificación tan definida y marcada? ¿por qué atribuir colores a los géneros?
En mi corta experiencia trabajando con esas maravillosas personitas de tan corta edad, he podido comprobar como están muy marcados por las cosas que observan del entorno, cómo se les enseña a los niños que no les puede gustar el color rosa o como las niñas no pueden jugar con coches. Absurdo, lo sé, pero en los tiempos que se supone vivimos esto aún existe.
Son todo estereotipos y etiquetas que durante esta época del año se agravan un poquito más y van marcando a lxs más pequeñxs.
Senorxs fabricantes de juguetes, apostemos por colores neutros, eliminemos la sección de niña y de niño… dejemos que ellxs mismxs elijan libremente a qué quieren jugar y qué color les gusta más. De esta manera conseguiremos criar personas libres, con un adecuado autoconcepto y autoestima, capaces de decidir por sí mismos y críticos con lo que les rodea.

P.D.: a colación de esto, muy bien traido el video de Herrejón en el que habla de por que é odia la navidad, a partir del minuto 3:15 donde empieza a hablar de los juguetes de lxs niñxs (aqui os lo dejo: https://www.youtube.com/watch?v=UMWaksUMh_0 )

El merchandising.

Ayer mismo paseándome por la Fnac relajadamente con mi hermana, y en nuestra busca incansable por saciar el vicio hacia Juego de Tronos, nos encontramos con sus productos, fascinándonos a cada paso con los precios que tenían… ¿Estamos todxs locxs? ¿Una bolita para poner en el árbol 13 euros?
Vamos a ver, entiendo que es la moda, que se vende mucho y muy bien, que es el fenómeno del momento, pero una cosa digo yo: ¿es necesario ponerle esos precios tan desorbitados a según qué cosas?
Hablo de Juego de Tronos porque es lo que ahora mismo tengo más presente, pero podría hablar de ilustradoras, empresas con mensajitos bonicos y un sin fin de marcas que elevan sus precios en artículos básicos como tazas y libretas.
Por descontado lo mismo pasa con los juguetes de series/películas que están más de moda ese año, véase la Patrulla Canina, Frozen, Trolls, etc…
Me acuerdo especialmente de cuando salieron las Monster High…. menuda locura fue aquello!! Mis tíos buscando la muñeca que quería mi prima, locos porque la tuviera y dispuestos a pagar lo que sea…

Dicho todo esto, tengo que decir que la navidad es una época que especialmente me encanta, creo que se respira un ambiente especial vayas por donde vayas, las casa se inundan de ilusión, las familias se reúnen… me parece mágico, sencillamente ^^

Así que por mí parte, os invito a disfrutar de ella de manera sostenible y responsable, sacándoles el máximo provecho y apreciando todo lo que nos puede dar!