‘Nosotras’

Ha sido mucho tiempo de silencio, lo sé… pero han sido semanas complicadas. Pero para compensar, os traigo algo de actualidad y que tenía ganas de hablar desde antes de abrir el blog.

Anoche en ‘Salvados’ (el programa de los domingos por la noche de Jordi Évole) emitió un programa llamado «Nosotras»… solo con el título ya podéis haceros una idea de sobre qué iba. Efectivamente, hablaba del papel que tiene la mujer en la sociedad actual, de cómo ese papel ha cambiado a lo largo de los últimos años (poco, por cierto) y del futuro cambio que se puede producir.

Entre cuatro mujeres con distintas profesiones y maneras de pensar, abrieron un debate acerca de varios temas: educación, machismo, trabajo, etc. Si no lo visteis os animo a que lo hagáis, seáis mujer u hombre, jóvenes o adultos… invita a la reflexión, de verdad, sobre como en los tiempos en los que vivimos creemos que hemos alcanzado cierta estabilidad e igualdad entre las personas (porque al fin y al cabo todxs somos personas), cuando realmente no es así (quedó demostrado con varios datos que sacaron en los que las mujeres siempre salíamos perjudicadas).

Me gustó mucho un momento en el que se pusieron a hablar de los estereotipos y convenciones sociales que tenemos establecidas como mujeres desde el momento en el que nacemos y que, si se te ocurre posicionarte tanto en un «extremo» como en el otro estás expuesta a ser juzgada de una manera muy dura.
Aparecieron dos referentes de mujer de mediana edad: una casada con un niño y otra en camino que había decidido dejar su carrera laboral por unos años para dedicarse a criar a sus retoñxs, y otra que había decidido triunfar en su vida laboral olvidándose de tener hijos (por decisión propia y no condicionada por su trabajo). Ambas dos eran felices con la vidas que habían ELEGIDO.  Y recalco lo de elegido, porque en el debate que se abrió y lo que ellas mismas concluían en sus intervenciones, era la capacidad que tenían de ser libres y poder elegir la vida que querían llevar, cosa que me parece fundamental como mujer y como ser humano.

A raíz de esto, y centrándose principalmente en la mujer que había triunfado en su carrera profesional, hablaron de su marido (que había dejado toda su vida para acompañar a su mujer en su sueño de dedicarse a lo que quería), lo que trajo consigo el tema del feminismo (se me cae la cara de vergüenza cuando leo algunas definiciones de la palabra feminismo). Muchxs os echaréis encima y me podréis criticar, pero bajo mi punto de vista todo el mundo debería ser FEMINISTA, sí, porque el feminismo (bien entendido y sin extremos) busca la igualdad de oportunidades y un trato justo entre ambos sexos, y no vengáis con que si el hembrismo (este término no debe estar muy contemplado, menos mal, en internet porque me lo marca como que esta mal escrito XD), el sexismo… porque entonces es que no habéis entendido nada, perdonad que os diga.

Hoy por hoy puedo decir alto y bien claro que soy FEMINISTA, aunque si me hubierais preguntado hace poco más de un año te lo hubiera dicho con la boca chica y matizando un montón mi respuesta, porque realmente ahora defiendo cosas que considero son básicas para la sociedad en la que vivimos: debemos luchar por una sociedad en la que hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades para desarrollarse en el mundo laboral, para que se les consideren de igual manera a partir de sus capacidades, que puedan tomar la decisión de formar una familia sin que eso perjudique al resto de aspectos de su vida, que crean conscientemente en un desarrollo sostenible de las personas dentro del entorno en el que viven… y ya estoy desvariando el asunto en la educación, así que os prometo otra entrada en la que hablaré de la educación y el feminismo.

El programa terminó con una muy buena y acertada conclusión del problema actual: nos queda mucho por hacer para conseguir esa equidad tan ansiada. Y yo, como maestra, voy a seguir haciendo lo posible para que dentro de lo que este en mi mano, la sociedad futura sea mucho más abierta, comprometida, crítica y consciente.